Telepatía sintetica global, marimonio gay en todo el mundo, guerras a
control remoto, moneda única global, geoingeniería y aumento de la función
cerebral son algunas de las cosas que probablemente sucederán en el próximo
siglo, según la BBC.
La BBC ha compilado una interesante lista de 20 posibles
acontecimientos notables para los siguientes 100 años basándose en la
aportación de sus lectores y en la curaduría editorial del futurista Ian
Pearson. Si creemos, como el escritor
Wallace Stevens, que “la imaginación es la voluntad de las cosas”, entonces tal
vez este ejercicio sea también una especie de profecía autocumplida o una
construcción a distancia. Más allá de un
intempestivo Apocalipsis, es posible que el mundo viva una serie de fascinantes
cambios, al parecer bajo el imperio de la aceleración tecnológica, que lleva la
vanguardia en cuanto a lo que se refiere al desarrollo y transformación de la
natureleza.
1. Los océanos serán cultivados extensamente (pero no solo con peces).
Ian Pearson considera que esta tendencia es inevitable, ya que
tendremos que alimentar a 10 mil millones de personas y la tierra firme no dará
abasto. El cultivo de algas para producir energía renovable, para materias
primas y la extracción de recursos es una de las alternativas más plausibles
para la sobrevivencia. Algas genéticamente modificadas para absorber más
nitrógeno podrían liberar hasta el 68% del agua que se usa actualmente en la
agricultura convencional. Por otro lado, recientemente se ha descubierto que el
fondo del océano es similar a un bosque tropical en cuanto a la enorme cantidad
de biodiversidad que tiene y se revela como una fuente de gran riqueza para el
futuro (aunque eso podría significar la explotación indiscriminada).
2. Nos podremos comunicar a través de transmisiones telepáticas .
Los editores de la BBC piensan que esto es totalmente probable:
“recoger pensamientos y reproducirlos en otro cerebro no será más difícil que
almacenarlos en el Internet” y “la telepatía sintética suena como algo de
Hollywood, pero es completamente posible, siempre y cuando la comunicación se
entienda como señales eléctricas y no palabras”.
Actualmente ya existen numerosos aparatos —algunos de ellos
inalámbricos— que traducen las ondas cerebrales de una persona y lo transmiten
a una máquina, de tal forma que es posible controlar una silla de ruedas, por
ejemplo, con la mente. La complejidad de los mensajes que pueden ser traducidos
sin duda aumentará. El límites es difícil de marcar, pero algunos científicos
ya mapean el cerebro para extraer imágenes del mismo, incluso se investiga la
posibilidad de grabar los sueños. Paralelamente la neurociencia avanza en la
identificación de neuronas individuales para ciertos procesos mentales: quizá
en 100 años podremos conocer literalmente el pensamiento de otra persona a
distancia, sin la necesidad de que lo exteriorice. Habrá quien, sin embargo,
considere que habría sido más fácil desarrollar la capacidad natural de empatía
(esa otra palabra para describir lo que conocemos como telepatía.)
3. Gracias a la ingeniería genética y a la robótica habremos creado
humanos hiper inteligentes que serán prácticamente inmortales.
Ian Pearson cree que es probable que el ser humano logre la
inmortalidad digital, es decir, que logre descargar una conciencia a una
máquina por un tiempo ilimitado. Esto será asistido por la modificación
genética que permitirá incrementar la longevidad “haciendo que las personas se
mantengan vivas hasta que la tecnología de inmortalidad electrónica este
disponible a un costo relativamente accesible”. El futurista Ray Kurzweil,
conocido por su tecno-optimismo, cree que esto ocurrirá en el año 2045 con la
llegada de la supuesta Singularidad tecnológica, el punto crítico de expansión
exponencial del conocimiento: en otras palabras, el momento en el que la
tecnología nos hará surgir de nuestras cenizas —o trajes de monos— para cruzar
el puente de la historia hacia el superhombre.
4. Podremos controlar el clima.
Algo que los editores de las BBC consideran muy probable, ya que
existe en la actualidad tecnología capaz de mediar tornados, generar lluvia e
incluso desvíar meteoros (por no hablar de las versiones conspiracionistas de
que existe tecnología para crear terremotos, como supuestamente es el caso de
HAARP). Asimismo, debido al cambio climático, se está apilando un gran
conocimiento sobre cómo funciona el clima y los sistemas meteorológicos. Existe
una corriente en la ciencia que cabildea a favor de la geoingeniería
(incluyendo a Bill Gates). Por otro lado
hay quienes consideran que la modficación climática artificial significa un
gran riesgo al alterar los patrones y ritmos naturales de un sistema holístico
como es la Tierra, algo que podría ser similar a abrir la mítica caja de
Pandora.
5. La Antártida estará “abierta para los negocios”.
Aunque existe un movimiento conservacionista para preservar la
Antártida (al igual que el Ártico) como una especie de reserva natural, también
hay creciente presión para explotar los recursos (minerales, petróleo y gas)
que pueden albergarse en esta zona polar. Habrá que ver si esta explotación se
da de manera armónica, respetando leyes internacionales o acaba siendo, como
suele suceder, un nuevo y rapaz colonialismo industrial. Por otro lado podría
sobrevenir un nuevo conflicto político internacional, puesto que, como todos
sabemos, ahi se encuentra la entrada a la civilización perdida de semidioses (o
a la guarida de Hitler y otros Nazis criogenizados) y, en el Ártico, la reserva
mundial de kriptonita, la cual será muy útil una vez que seamos invadidos por
los extraterrestres.
6. Una sola moneda global.
Los editores de la BBC se dividen en este caso. Por un lado consideran
que es posible, ya que una divisa electrónica única podría unificar y facilitar transacciones (y ha sido algo que
diferentes entidades como el Vaticano, la ONU e incluso Rusia y China han
pedido). Asimismo, ante la crisis económica mundial existe también una
tendencia en sentido opuesto (el fracaso del Euro podría inclinar la balanza).
El Internet permite nuevas formas de intercambio de valor, como las bitcoins o
el dinero de Second Life. Analistas como Douglas Rushkoff llaman al regreso del
dinero local, programado por pequeños grupos para permitir el intercambio fuera
de los asfixiantes paradigmas marcados por los grandes bancos. Hay que señalar,
también, que uno de los supuestos propósitos del llamado Nuevo Orden Mundial
sería justamente instaurar una moneda global virtual que pueda ser controlada
por un banco central.
7. Nuestros cerebros estarán conectados a las computadoras con una
interfaz.
De nuevo esto es altamente probable, el empleo de la nanotecnología y
de la hibridización biotecnológica para aumentar la función cerebral es una
tendencia arrolladora. Los editores de la BBC creen que para el 2075 el
mejoramiento de las capacidades cognitivas con la ayuda de las máquinas será
algo tan distribuido, que aquellos que no accedan a esta tecnología se verán
rezagados, quizás creando una división entre humanos aumentados y humanos no
aumentados.
8. Nanobots fluirán por nuestros cuerpos arreglando nuestras células.
Aunque actualmente los nanobots existen sólo en teoría, este campo
crece con velocidad y no hay nada (de nuevo, en teoría) que lo detenga.
Aparatos microcóspicos podrán interactuar con nuestros cuerpos a nivel de
células individuales y repararlas en tiempo real antes de que estas se
degeneren.
9. Habremos logrado la fusión nuclear.
Para el 2040 esto ya es altamente probable: y entonces podremos hacer
como los núcleos de las estrellas, generando la energía cósmica fundamental que
pone en movimiento a los astros en el universo. Los editores de la BBC creen
que, en cambio, la energía del viento no será de las predilectas y se volverá
impráctica y obsoleta.
10. Solo se hablarán tres idiomas: inglés, español, mandarín.
Otra tendencia fuerte con la globalización. Los idiomas “menores”
están desapareciendo a un ritmo acelerado y los otros idiomas mayores (como el
alemán, el ruso, el francés, etc.) se hablan generalmente en áreas en las que
la mayoría de los pobladores habla
también alguno de estos tres idiomas. Habrá que ver si esto se sigue
consolidando y en cieñ años la practicidad hace que la mayoría de los idiomas
pasen solamente al ámbito de lo académico. Por otro lado, si se consolida otra
tendencia a la ruptura con los grandes sistemas geopolíticos, es posible que
florezcan países-estados en los que se siga hablando idiomas locales.
11. Por lo menos el 80% del mundo aceptará el matrimonio gay.
Esto parece contundente en Occidente y probablemente signifique toda
una paleta de diversos matrimonios disponibles.
En otras regiones donde la religión tiene mayor influencia opondrán
mayor resistencia a esta tendencia que de todas maneras parece expandirse.
12. California liderará la ruptura de Estados Unidos.
Ya existen ciertos indicios de que California quiere dividirse y esto
podría intensificarse. La enorme diferencia entre la capacidad de generación de
riqueza en un país tan grande puede ser una bomba tiempo; también la diferencia
ideológica que se genera en un estado próspero en el que concurren diversas
etnias y formas de concebir la existencia podría influir.
13. Elevadores espaciales harán accesibles los viajes siderales.
Aparentemente los elevadores espaciales constituyen un paso lógico en
el desarrollo del turismo espacial y al multiplicarse harán menos costoso el
transporte al espacio, que, digamos, el vuelo en aeronaves como las de Virgin
Galactic. Por otro lado el desarrollo masivo de esta tecnología supone cierta
prosperidad mundial, algo que no puede garantizarse.
14. Las mujeres lo mismo se
embarazarán por inseminación artificial que por un hombre.
Algo que por el momento parece lejano, pero si se toma en cuenta que
el diagnóstico de implantación pre-genética permite que un embrión sea
seleccionado por sus características más favorables es cada vez más popular y
que es posible ya descartar embriones que tengan enfermedades congénitas, en un
futuro la inseminación artificial podrá asemejarse al diseño genético, donde se
captarán solamente los carácteres deseados.
15. Habrán museos para casi cualquier aspecto de la naturaleza, ya que
la mayoría de los habitats naturales estarán destruidos.
Esta fatídica predicción tiene
el riesgo de convertirse en realidad si el ritmo de extinción de especies y de
consumo de recursos sigue creciendo. Es posible que arribemos a un punto de
inmortalidad tecnológica, pero en la que solamente podremos participar en la
naturaleza a través de ambientes simulados o pregrabados. El mundo entero sería
un museo cuya vitalidad sería preservada sola-mente como estímulos eléctricos
programados en nuestro cerebro.
16. Los desiertos se convertirán en bosques tropicales.
El mundo se convertirá en un museo. O tal vez no si optamos por la
modificación climática e inicamos un proceso de reverdecimiento de los
desiertos.
17. El matrimonio será reemplazado por contratos anuales.
Mientras crece la aceptación del matrimonio gay, la institución del
matrimonio tradicional declina. Esto se acentúa entre más tiempo vivimos. Si en
un futuro podremos vivir más de cien y quizás cientos de años, la perspectiva
de pasar toda la vida con una sola persona se altera. “Las personas querrán
matrimonios que no duren para siempre y que no los dejen en la bancarrota
cuando acaben”, dice Ian Pearson.
18. Naciones soberanas dejarán de existir y se establecerá un gobierno
global.
Pearson ve todo lo contrario, la formación de pequeños países, algunos
incluso formados por corporaciones de manera similar a lo que sucede en la
novela Snowcrash. La punta de lanza serán los multimillonarios en control de
nuevas tecnologías que buscarán crear estados soberanos —pequeñas utopías— en
aguas internacionales. Aunque claro, tenemos la versión conspiracionsita de un
estado global totalitario con microchip incluido. O la versión new age
optimista de que todas las naciones se unirán bajo principios elevados de
libertad y compasión. Claro que para esto sería necesario un acontecimiento
transformador (o cataclísmico) que altere radicalmente nuestra forma de vida (y
nuestra conciencia).
19. La Guerra en el Oeste será llevada a cabo meramente por control
remoto.
Una tendencia relativamente fuerte con el desarrollo de los drones
(aviones no tripulados). Sin embargo, el atractivo dramático de llevar soldados
a la guerra para alimentar la máquina de sacrificio y crear entrenimiento
mediático es un arma cuyo desuso costará trabajo a los gobiernos occidentales.
20. Gran Bretaña vivirá una revolución.
Quizás sintiendo la presión de trabajar en una empresa estatal, Ian
Pearson señala que esto no es del todo probable. Pero si nos limitamos a la
historia reciente, tiene razón.