NADA SE ATORA CON PLATA.

A estos ricachones les gustó mucho este lugar en HAWAII para descansar en su hamaca, solo que había un problema: solo había una palmera y necesitaban dos. Por eso, mandaron llamar a su mayordomo LUCRECIO, le ordenaron que entrara al mar y que sujetara la cuerda de la HAMACA.

De esta manera pudieron pasarse una gran tarde, cómodamente tostándose al sol.

GGGUUUUAAAAAUUUUUU!!!!!