Una mujer -Friedl Dicker Brandeis- dedicó su internado a enseñar clandestinamente arte y pintura como terapia evasiva a muchos de esos niños. Antes de marchar al patíbulo, Friedl rescató 4.500 de los dibujos que más tarde sirvieron como prueba en el Juicio de Nuremberg, y que son testimonio indeleble de aquella barbarie.
Aquí les presento varios de esos dibujos tan bellos y humanos ...
1.- “Todo el mundo tiene hambre”, realizado por Liana Franklová, de 10 años, en Terezín.
3.- Ella Liebermann, de 16 Años. Como sardinas en lata, los judíos de toda Europa eran enviados a la muerte. Dibujo sobre el "Gueto de Bedzin", en Polonia.
4.- Ella Liebermann, de 16 Años. Los niños son arrancados de los brazos de sus madres. Realizado en el "Gueto de Bedzin", Polonia.
5.- Alfred Kantor, de 17 Años, escribió sobre su dibujo :”Tocar la alambrada significaba la muerte instantánea. Aún así, la gente compartía pan, una sonrisa, una lágrima…“. Terezín.
6.- Edita Pollakova, de 9 Años. Llegada del tren de deportaciones a Terezín. Edita desafortunadamente murió el 4 de octubre de 1944, en el Campo de Concentración de Auschwitz.
7.- Ella Liebermann, de16 Años. "Comiendo" y "Distribución de la sopa", dibujos realizados en el Gueto de Bedzin, Polonia.
8.- Helga Weissova. 13 Años. Dibujo titulado “Llegada a Terezín”. Helga ingresó en el campo con tan sólo 12 años. Llevó consigo su caja de pinturas y su cuaderno para realizar más de 100 dibujos, haciendo lo que su padre le dijo: “Pinta lo que veas“. Aquí acabó la infancia de Helga: con la responsabilidad de contar todo lo que veía y experimentaba. Helga fue una de las pocas supervivientes.