En la playa, con arena, se pueden hacer muchas cosas para divertirse, como los famosos castillos que se esculpen hasta que llega una ola y lo tumba con su fuerza.
Pero, con dos guardapolvos, un espejo lateral y un poco de paciencia, se pueden hacer esculturas tan bonitas como la de esta fotografía.
Yo la verdad prefiero hacer un coche en la arena que un castillo, ¿no crees?